Sin duda el aceite de lavanda es un tratamiento preventivo excelente para el acné facial, ya que puede detener todos los brotes y también limpia las manchas leves de las pieles afectadas. Es muy concentrado por lo que debemos diluirlo para utilizarlo en la piel y siempre debemos consultar con nuestro especialista dermatólogo aún cuando los preparados sean caseros y naturales.
También puede ser mezclado con otros aceites como el de almendras para suavizar la piel, pero fundamentalmente un tratamiento natural contra el acné facial es el aceite de lavanda.